Someone like you.

Desde que era pequeña soñaba con ese príncipe azul que veía en las películas de Disney. Pensaba que yo era la bella durmiente y que algún día, el príncipe me rescataría de mi torre. Cuando me hice un poco más mayor empecé a descubrir que las cosas no salen como en las películas, que el amor no era lo que yo pensaba. Y aun así, tras cada palo, tras cada desilusión, sabía que llegaría alguien, mi media naranja, mi Prince Charmant. Alguien que conociera mi mal humor y quisiera aguantarlo, alguien que con solo mirarme fuera capaz de leerme, porque soy como un libro abierto. Alguien que supiera que detrás de una fachada fuerte, se esconden mil inseguridades. Alguien que una a una, las mil, las convirtiera en sonrisas. Alguien que estando yo despeinada y sin maquillar, me dijera que soy preciosa. Alguien que me abrazara al dormir y que, al despertarme, siguiera abrazado a mí. 
Puede que muchos me tomaran por soñadora, ¿y qué? No dejéis que nadie, ni siquiera yo, os diga que no podéis cumplir vuestros sueños. Porque al final, a pesar de todo lo que nos puedan decir, los sueños se hacen realidad.